¿Tendré Náuseas Durante el Tratamiento y Qué Puedo Hacer al Respecto?

Una preocupación frecuente en la preparación para la quimioterapia (y el tratamiento del mieloma en general) son las náuseas. ¿Experimentará este efecto secundario?

La respuesta es... tal vez. No todo el mundo las tiene, pero muchos sí. Y las náuseas suelen ir acompañadas de aversión a la comida y vómitos. La buena noticia es que hay muchas formas de sobrellevarlo y que no dura para siempre.

¿Qué son las náuseas inducidas por la quimioterapia?

No es muy diferente de lo que se experimenta con la gripe estomacal en general o con un embarazo típico. Es esa sensación de que tu estómago no está contento. Revuelto, miserable, con ganas de vomitar. También puedes sentirte mareada y sudorosa.

¿Cuándo experimentaré estos síntomas?

Normalmente, los síntomas son más pronunciados en los días en que recibe algunas quimioterapias, aunque muchos efectos secundarios de la medicación para el mieloma también pueden inducir náuseas, y pueden durar más tiempo. Si va a someterse a un trasplante de células madre, los síntomas pueden durar semanas, aunque muchos pacientes no los padecen en absoluto (o son mínimos).

¿Qué debo hacer si tengo náuseas?

Antes de iniciar el tratamiento, asegúrese de que su médico le recete medicación contra las náuseas para tenerla a mano. Si experimenta este síntoma, tómese la medicación, y tómesela exactamente como se la hayan recetado. Si la medicación no le ayuda y tiene problemas para retener líquidos, avise inmediatamente a su médico. A menudo, los pacientes reciben líquidos y nutrientes por vía intravenosa si los síntomas persisten. Coma alimentos que le parezcan apetecibles. Tenga paciencia: puede que lo que le parezca apetecible no sepa bien o no le siente bien al estómago. Es posible que tenga que probar muchos alimentos diferentes antes de encontrar algo que funcione. En general, evite los alimentos grasos, fritos, salados, dulces o picantes. Los cítricos son algo que definitivamente querrás evitar. También debes evitar los alimentos cuya temperatura sea elevada. Lo mejor es lo insípido. Además, evita las comidas abundantes y opta por pequeños tentempiés a lo largo del día (si es posible). Y lo más importante, asegúrate de beber líquidos, muchos líquidos. Y si no puede, llame a su médico inmediatamente. Mantenerse bien hidratado es muy importante. Intenta beber pequeños sorbos de agua con frecuencia.

¿Hay ciertos alimentos que deba tener a mano durante el tratamiento?

• Agua
• Infusiones (no demasiado calientes), especialmente de jengibre
• Caldo claro
• Sopas a base de caldo
• Refrescos claros, como Sprite, ginger ale y club soda. El té helado es una buena opción, al igual que algunos zumos, como los de arándanos y uva.
• Pedialyte y Gatorade claro
• Pollo
• Cereales a base de arroz
• Galletas saladas y pretzels
• Copos de avena
• Pasta, arroz y fideos
• Puré de patatas o patatas sin mucha sal ni demasiadas especias
• Pan blanco
• Plátanos
• Manzanas
• Puré de manzana
• Gelatina
• Yogur
• Uvas
• Paletas

Si se queda neutropénico (cuando su organismo no tiene sistema inmunitario), tendrá muchas restricciones alimentarias. No podrá comer frutas y verduras frescas, ni comer en la mayoría de los restaurantes. Deberá evitar los bufets y la mayoría de las comidas recién preparadas. Asegúrese de consultarlo con su médico antes del tratamiento.

SOBRE LA AUTORA

Lizzy Smith

A Lizzy Smith le diagnosticaron mieloma en 2012, a los 44 años. A los pocos días, dejó su trabajo, puso fin a su matrimonio, se mudó y comenzó el tratamiento. "En la medida de mis posibilidades, quiero demostrar que, a pesar de los mayores desafíos de la vida, es posible sobrevivir y salir más fuerte que nunca", afirma.